Expansión del 6%, ni con nearshoring: Ceesp
Se estiman tasas por debajo del objetivo planteado por la actual administración federal; inversiones se pueden atraer mejorando la seguridad y aplicando el Estado de Derecho
A pesar de la llegada de inversiones por el fenómeno de la relocalización de empresas e inversiones (nearshoring), las previsiones de crecimiento económico para los próximos 10 años se ubican en 2.2% ante la falta de políticas públicas de largo plazo, dijo el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
Para 2024 y 2025 se estiman tasas de expansión de 2.2% y 1.9%, respectivamente, pronósticos por debajo del objetivo que inicialmente se planteó la actual administración federal, de llegar a un avance del Producto Interno Bruto (PIB) del 6% al cierre del sexenio.
“Las previsiones apuntan a que el crecimiento será de sólo una tercera parte de lo previsto, aún con la expectativa favorable del efecto del nearshoring”, agregó el Ceesp en su Análisis Económico Ejecutivo semanal.
Para la institución es necesario que se aproveche la oportunidad de atraer proyectos de inversión mejorando el ambiente de seguridad y aplicando el Estado de Derecho.
El Centro de Estudios afirmó: “La facilidad con que quienes atentan contra las leyes se libran de enfrentar algún castigo, sólo estimula un entorno de inseguridad física, patrimonial y de baja productividad que inhibe innumerables intentos de lograr una mejor calidad de vida de los hogares mediante el emprendimiento”.
“Es obvia la necesidad de establecer un robusto Estado de Derecho, claro y sólido que contribuya a generar un ambiente seguro para un mejor y más amplio desarrollo de la actividad económica del país”, destacó.
En un país que tiene un Estado de Derecho “débil”, naturalmente hay delitos que se incrementan, además de que “la preocupación aumenta cuando se percibe que las acciones de las autoridades y propuestas políticas para hacer frente a esta problemática no se coordinan de manera adecuada o no cuentan con recursos suficientes”.
Ante ello, se puede beneficiar más a grupos delictivos que a la población en general, lo que preocupa, porque “sin un combate frontal y exitoso por parte de las autoridades de todos los órdenes de gobierno, no será posible establecer un ambiente social y de negocios en el que prive la libertad y facilidad de emprender”.
Tampoco habrá incentivos para invertir “en busca de mayor utilidad, productividad y beneficio para la actividad productiva y la generación de empleos”, dijo el Ceesp.